miércoles, 15 de octubre de 2025

El caso del cuadernillo sexual retirado de las escuelas sevillanas


La derecha sevillana, con el PP al frente y Vox marcando el paso, ha decidido que un cuadernillo de educación sexual es demasiado para las aulas. Lo han retirado, dicen, para darle un remozado, como quien pule un mueble viejo antes de decidir si lo tira o lo guarda en el trastero. Pero no nos engañemos porque esto no es un retoque estilístico, sino una cesión en toda regla. en palabras de Cristina Peláez, portavoz de Vox, quien por supuesto aplaude lo que en su formación política consideran una "buena noticia". 


El cuadernillo, sin embargo, no es precisamente un tratado subversivo. Explica lo que cualquier padre o madre sensato querría que sus hijos entendieran, que sus cuerpos les pertenecen, que el respeto es la base de toda relación, que la pubertad no es un misterio vergonzante sino un proceso natural. Habla de placer, sí, pero como parte de una sexualidad sana, responsable y consentida. Nada que no esté ya en la ley, porque la educación afectivo-sexual es un derecho, no un capricho, que ha de estar blindado por las normas educativas.


La presión ultraderechista, con su cruzada por devolver la sexualidad al ámbito doméstico como si se tratara de un secreto de familia que no debe salir de casa, ha conseguido doblarle el pulso al PP una vez más. No es la primera ocasión en que la derecha ultra se arrodilla ante la ultraderecha para no perder su favor, aunque en esta ocasión tengo para mí que igual no les ha costado demasiado esfuerzo habida cuenta del proverbial meapilismo pepero. El mensaje parece claro: la prevención, el conocimiento y la protección de los menores no importan cuando hay rédito político en juego. 


La excusa oficial es que un grupo de expertos revisará el material, como si los que lo diseñaron no supieran de qué hablaban. Las asociaciones de padres se llevan las manos a la cabeza, y con razón, porque retirar el cuadernillo pone en cuestión un pilar educativo que busca prevenir la violencia de género, el abuso y la desinformación. Si no se habla de sexualidad en las escuelas, los niños aprenderán en otros sitios, en las redes, en los parques o en los callejones oscuros de internet donde nadie les hablará de respeto ni de consentimiento. 


En Sevilla la educación sexual ha perdido un asalto. Esperemos que la batalla no. Los padres, los docentes y la ley están del lado de los niños y de su derecho a crecer informados y seguros. Hay cosas que no se negocian y esta ha de ser una de ellas. Tocará pelear. 


J.T.

martes, 14 de octubre de 2025

Mentir no es ilegal. Y si es pecado, pues me confieso y ya está.


Cuando un representante público sostiene que “mentir no es ilegal” está diciéndonos que para él la verdad es negociable, secundaria y prescindible. Lo han proclamado en el PP para defender las tropelías de Miguel Ángel Rodríguez y se han quedado tan anchos. Pues bien, yo creo que se han pasado. Esto no se puede quedar así.


Que mentir no sea ilegal no quiere decir que no sea una indecencia inaceptable. El problema no es la mentira en sí, sino su aprobación tácita como herramienta legítima. Esto complica la educación en familia de los más pequeños y transmite una sensación de barra libre hacia la amoralidad que dificulta una convivencia ciudadana en paz y armonía. ¿Ahora cómo les vamos a decir a nuestros hijos que no mientan? 


No tengo claro si un político ha de ser ejemplo de algo o no, pero si se dedican a comparecer en los medios para soltar este tipo de cosas nos dificultan mucho la vida a quienes todavía continuamos creyendo que ser decente merece la pena. Además de cabrearnos, también nos desarman, hay que reconocerlo. La mentira deliberada y la distorsión de los hechos, escribió Hannah Arendt, son más peligrosas para una democracia que cualquier otro delito porque acaban erosionando la confianza en la palabra pública. 


Declarar públicamente que “mentir no es ilegal” es toda una estrategia, no un lapsus. Se trata de un maniobra clásica que consiste en transformar un debate moral en una discusión técnica. La frase además refleja una cierta fatiga democrática, es el equivalente político a salir indemne de una travesura de colegio porque como no me pillaron, no pasó nada. Todo político debe guiarse por la “ética de la responsabilidad”, que dijo Max Weberlo que significa rendir cuentas en cada momento no solo a la ley, sino a los ciudadanos que depositan su confianza en él. 


No podemos dejar pasar este tipo de cosas como si se tratara de una gracieta sin importancia, nos toca no tolerarlo, hay que tomárselo muy en serio y protestar de manera contundente, denunciarlo en cuanta tribuna sea posible así como obligar a los políticos a tratar a la ciudadanía con el respeto que nos merecemos.


Diré más, la frase es todo un desafío además de una desconsideración. Si aceptamos que mentir no es ilegal y, por tanto, tolerable, estamos abriendo la puerta a un sistema donde la verdad es solo un accesorio decorativo. Lo más gracioso de todo esto es que quien lo ha dicho es un partido cuyos militantes y votantes profesan en su mayoría la religión católica. Para ellos, puede que si es ilegal sea hasta pecado pero no importa: después se confiesa uno, reza dos padrenuestros  y ya está.


J.T.

lunes, 13 de octubre de 2025

Ponga un sondeo electoral en su vida. O no.

Los sondeos son todos mentira, pero es una mentira consensuada.


Por eso los periódicos que le otorgan un futuro de ensueño a la derecha ultra y la ultraderecha se quejan de vicio cuando atacan las encuestas del CIS.


Fiarse de las encuestas no es aconsejable porque los encuestadores no se fían de los encuestados ni los encuestados de los encuestadores. Por eso mienten tanto unos como otros. Si alguien me viniera a preguntar para una encuesta electoral, algo que nunca en mi vida me ha sucedido, no tengo ninguna duda: le mentiría descaradamente.


Imagino que la ciencia estadística cuenta con esto, pero por mucho que corrijan, por mucho que manipulen, por mucho que cocinen, se parecen bastante a los juegos de azar. Más al bingo que a la lotería, porque las probabilidades de acertar son más altas, pero juegos de azar al fin y al cabo.


Luego está esa curiosa propensión que por lo general el común de los mortales tenemos a confundir nuestros deseos con la realidad. En consecuencia, solemos empatizar, solemos creernos más aquellos resultados que coinciden con nuestro anhelos. No está mal, sobre todo si eso nos proporciona aunque sea unos minutos de bienestar.


Las encuestas de La Razón, El Español o el Mundo le suelen alegrar la vida al PP y a Vox. Las de Iván Redondo o las de Tezanos hacen lo propio con el PSOE. Los partidos más pequeños, los que no cuentan con presupuesto para contratar a alguien que les regale mentiras piadosas de vez en cuando, lo tienen más complicado.


Con dinero es más fácil encontrar quien te haga la pelota, con dinero es más fácil comprar periodistas que mientan sin parar, organizaciones que presenten querellas con recortes de periódico que al final, qué casualidad, acaban encontrando un juez solícito que abre un sumario con ellos.


Es verdad que las encuestas marcan tendencias y reflejan estados de ánimo, pero a mí me divierte que los resultados puedan variar tanto de unas a otras, que haya tanta empresa, tanta institución dispuesta a invertir para que te engañen, para que te digan lo que quieres oír y no la verdad. Un ridículo juego de niños que, de manera periódica, abre primeras páginas de periódicos e informativos de radio y televisión.


Según La Razón, el PP ganaría hoy con cerca de un treinta y cinco por ciento de los votos, lo que significaría entre 150 y 152 diputados, y Vox quedaría como tercera fuerza, con un dieciséis por ciento. En ese escenario, la suma de PP y Vox alcanzaría los 199 escaños (sobre 350), lo que les daría una mayoría parlamentaria amplia. Otros sondeos de alcance nacional coinciden en que la derecha ultra y la ultraderecha mantienen una ventaja de 8 a 10 puntos sobre el bloque de la izquierda. 


Mas hete aquí, ¡oh, sorpresa!, que este lunes ha llegado el CIS con las rebajas y contradice todo lo anterior: el PSOE lideraría con casi un treinta y cinco por ciento de intención de voto mientras que el PP caería por debajo del veinte. Vox subiría hasta casi el dieciocho, lo que situaría a los fascistas titulares a solo dos puntos del PP. Traducción: la suma PP y Vox no llegaría, hoy 13 de octubre, a la mayoría absoluta de 176 escaños. 


Estupendo, que se diviertan con sus juguetes si eso les hace felices y que nos dejen en paz. Que gobiernen los que tienen que gobernar, que los de la oposición hagan una oposición decente, dejen de crispar e insultar, y que a los ciudadanos nos dejen respirar. Cuando llegue el día de meter las papeletas en el sobre, ya hablaremos. 


J.T.

Los pasos atrás en las autonomías del PP

Si lo que están haciendo las autonomías gobernadas por el PP cuenta con el respaldo de Núñez Feijóo, malo; y si no lo tiene, peor. Reconozco que no he podido evitar una cierta desazón estos días cuando veo el destrozo que las derechas continúan perpetrando en aquellas comunidades donde gobiernan. Libertades que creíamos consolidadas vuelven a tambalearse. Anulan leyes, cuestionan derechos, reivindican modos y maneras de tiempos oscuros que habíamos conseguido olvidar, cuestionan el progreso y preconizan la vuelta atrás. 

En Extremadura, el pasado jueves la Asamblea regional derogó la Ley de Memoria Democrática que venía a hacer justicia con los 14.000 represaliados que siguen en cunetas y fosas comunes en la región. PP y Vox, que cuentan con mayoría, aprobaron lo que han dado en llamar una nueva “Ley de Concordia”, es decir, una bajada de pantalones más de los populares ante los fascistas titulares para conseguir aprobar los presupuestos. Que con esta ley “miran al futuro”, dicen. ¿Cómo, arrancando placas, archivando expedientes, devolviendo al silencio a los que nunca tuvieron voz? Alberto, ¿no tienes nada que decir?


En Madrid, otra sumisión del PP a Vox, en este caso del alcalde Almeida, sacó el asunto del aborto a pasear hasta que también el pasado jueves su comadre Ayuso remató la faena mandando fuera de Madrid a las mujeres que quieran abortar. Lo escuché y no me lo creía: ¿cómo se puede ser tan borde, tan deslenguada, tan desconsiderada? Anunciaba además que se negaría a realizar el registro de médicos objetores al que obliga la ley. En este caso Alberto reaccionó horas después con una carta pública: “Garantizaré siempre –decía- que cualquier mujer que opte por la interrupción de se embarazo pueda hacerlo con la mejor atención médica y sicológica, conforme a las leyes” 


En Andalucía, donde la sanidad pública vive su peor etapa en décadas, la crisis de las mamografíaslas miles de mujeres que no fueron informadas en tempo y forma de los resultados de sus pruebas, es la metáfora perfecta de la desconsideración hacia la ciudadanía, del gran error que supone descuidar la sanidad pública. Lo que antes era un derecho ahora es una lotería. El “Sálvese quien pueda” convertido en política sanitaria tras las descaradas privatizaciones que proporcionan suculentos beneficios a amiguetes y familiares varios. Alberto, ¿esto tampoco lo piensas parar?


En Valencia, las lluvias torrenciales han mostrado el precio del desmantelamiento ambiental. La dana de hace un año se llevó por delante vidas y viviendas dejando al descubierto la irresponsabilidad de quienes recortaron en prevención, se negaron a invertir en infraestructuras y mintieron, como evidencian nuevos vídeos, sobre la manera de gestionar la tragedia. El otro día Mazón usó “su” televisión pública para tratar del asunto con el desparpajo que le caracteriza sin ser replicado por sus periodistas felpudo en una retransmisión cuya audiencia -1,7% (0% entre el público de 25 a 44 años)- deja claro hasta qué punto el personaje produce grima. Sus gobernados lo quieren fuera, pero no hay modo. Feijóo aquí tampoco actúa, él sabrá por qué.


Ya que hablamos de televisiones “públicas”, en Galicia, TVG se ha convertido en el manual de estilo de la propaganda institucional. Los informativos parecen boletines de partido, los trabajadores se rebelan y los espectadores cambian de canal. En lugar de servir a los gallegos, sirve al gobierno del PP. Aquí Alberto tampoco tiene nada que decir porque, entre otras cosas, esta eficaz maquinaria quien la puso en marcha fue precisamente él. 


En Castilla y León, a pesar del escándalo de este verano con la gestión de los incendios, aún se duda sobre si los medios de extinción deben ser estacionales o permanentes. Las políticas de Mañueco erosionan además sin discusión derechos sociales, sanitarios y laborales. Se practican recortes presupuestarios, aumenta el odio, se discrimina al colectivo LGTBI y la población en riesgo de pobreza supera el 22 por ciento ¿Feijóo aquí? Ni está, ni se le espera.


En cuanto a Murcia, es toda una muestra de cómo el PP se pliega a las exigencias de Vox apenas necesita ayuda: para aprobar los presupuestos López Miras no dudó en revocar la compra de viviendas para menores migrantes no acompañados, reducir ayudas a sindicatos y patronal o cerrar el centro de acogida para menores. Al tiempo, el Mar Menor sigue muriéndose a la vista de todos, víctima de la connivencia entre política y negocio.  


En Cantabria, el actual gobierno regional parece empeñado en borrar cualquier rastro de políticas sociales progresistas. Su prioridad no es avanzar sino desmontar lo anterior, como si el progreso de los demás fuera una afrenta personal. En noviembre del año pasado derogaron también la Ley de Memoria Histórica y Democrática, los recortes en educación y dependencia perpetúan las desigualdades y las listas de espera en Sanidad son cada día más largas y lentas porque los presupuestos priorizan la deuda sobre la inversión social. 


¿Y BalearesAquí también el guion se repite, a pesar de la ruptura del PP con Vox: se han producido recortes culturales, revisionismo educativo, censura de obras incómodas, se está intentando reescribir la historia con brocha gorda aunque al menos aquí no han conseguido derogar la ley de Memoria. Se han dado pasos atrás también en violencia de género y en derechos LGTBI… aplicando siempre la plantilla con la que se suelen normalizar las regresiones: primero se niegan, luego se maquillan, después se normalizan. 


Todo esto junto deja una sensación difícil de soportar, la de estar viendo cómo el país se deshilacha por las costuras más débiles. No hay grandes anuncios, no hay golpes de efecto; hay una lenta y calculada marcha atrás, un desmantelamiento de lo que costó décadas levantar. Y lo peor no es que lo hagan, lo peor es que lo hacen intentándonos vender que el retroceso es progreso. ¡Hay que tener poca vergüenza!


Nos están devolviendo a un país más miedoso, más desigual, más dividido. Pero hay algo que no pueden borrar: la memoria de quienes ya lucharon por esto antes. Y si entonces se avanzó contra viento y marea, también ahora sabremos decir que no. No al miedo, no al silencio, no a la resignación. Cada paso atrás duele más cuando sabes cuánto costó dar el anterior hacia adelante.


Vuelvo a preguntarme, ¿las autonomías gobernadas por el PP actúan con el visto bueno de Núñez Feijóo o va cada una por su lado y a su aire? ¿Se le ha ido el partido de las manos a su todavía presidente, le quedan algo más que los aplausos hipócritas de su grupo en el Congreso cada vez que suelta una tontería? Su predecesor ya probó esa medicina y vio cómo los aplausos se convertían en cuchilladas de un día para otro. ¡Ánimo, Alberto!


J.T.




domingo, 12 de octubre de 2025

Qué hacer con la celebración del 12 de octubre

El Día de la Hispanidad (tiempo atrás llamado de la Raza) ya no es lo que era. Lo que resulta difícil diagnosticar de momento es si esto será para bien o para mal. Probablemente haya una prueba del nueve: mientras la cabra de la legión, o el borrego Baraka, tanto da, continúe desfilando por la Castellana cada doce de octubre, será para mal porque ¿qué celebramos en realidad? ¿la violencia, la explotación y la imposición de nuestra religión, nuestra lengua y nuestras costumbres sobre pueblos indígenas? ¿por qué no pedimos perdón por los destrozos que perpetramos allí, como hizo en su día el papa Francisco, como han  hecho Canadá o Australia? 


¿Qué celebramos, por qué lo celebramos, a qué aspiramos con celebrarlo? Algo desde luego se está moviendo por los predios madrileños a propósito de esta “festividad”. Algo que no huele demasiado bien. Si es un día tan español, ¿qué hace el partido que se considera más “español” de todos borrándose de la tarima oficial, qué hace Abascal plantando al jefe del Estado? ¿qué se está urdiendo, qué se nos está escapando de lo que pasa en esa insufrible olla a presión llamada Madrid? 


Algunas comunidades latinoamericanas asentadas en nuestro país coinciden con sectores sociales vascos y catalanes cuando cada año, al llegar estas fechas, insisten en que que no hay “nada que celebrar”. Reputados analistas afirman que el viraje ultra de Ayuso, aborto incluido, se debe entre otras cosas a que en Madrid hay un millón de latinoamericanos hipotéticos votantes de derechas a los que hay que complacer. Pedro Sánchez, por su parte, hace público un video en el que, tras repasar vida, costumbres y folclores varios de distintos lugares de España remata deseándonos una “Feliz Fiesta Nacional”, denominación esta, por cierto, oficial desde 1987. En el vídeo del presidente no se ve ni un soldado, pero en la Castellana el desfile de uniformes, metralletas, tanques y aviones ha sido retransmitido como siempre por televisión con toda pompa y alharaca.


No sé si me ocurre solo a mí, pero con esto de las celebraciones del 12 de octubre cada vez ando más confuso. La fecha va cambiando de denominación pero la cabra de la legión ahí sigue. Como sigue la Guardia Civil celebrando por todo lo alto, con sus misas y sus mejores galas, la fiesta de su patrona, la virgen del Pilar. Repaso la repercusión en los periódicos, la retransmisión televisiva, escucho y leo a sesudos analistas y la única conclusión que consigo extraer es que esto es un guirigay. Nadie se atreve a meterle mano en serio. Amagos y ya está, se va postergando como tantas otras cosas y ahí andamos aguantando el paripé cada vez que llegan estas fechas que, como decía al principio, ya no son lo que eran. 


Hay quien piensa que el 12 de octubre podría transformarse, por ejemplo, en un día de reflexión crítica, centrado en la memoria de los pueblos indígenas que sufrieron las consecuencias de la colonización. Reformular esta fecha no tienen porqué implicar borrar la historia, sino narrarla desde una perspectiva más inclusiva, que reconozca tanto los intercambios culturales como las atrocidades cometidas. Más valdría ponerse las pilas y tomar decisiones cuanto antes. Mucho me temo que resulta fácil adivinar qué hará la derecha ultra y la ultraderecha con esta celebración si algún día tienen la oportunidad.


J.T.

sábado, 11 de octubre de 2025

No es broma: María Corina Machado, premio Nobel de la Paz

Los requisitos estipulados en el testamento del doctor Alfred Nobel establecen que el premio debe otorgarse a la persona que haya realizado "...el mayor o mejor trabajo en favor de la fraternidad entre las naciones, en favor de la abolición o reducción de los ejércitos permanentes y en favor de la celebración y promoción de congresos de paz". 


El Premio Nobel de la Paz debe reconocer a quienes trabajan por la paz y la resolución de conflictos. María Corina Machado firmó un acuerdo de cooperación con el Partido Likud en 2020 sobre asuntos políticos, ideológicos, sociales y de seguridad; apoyó a Netanyahu “en su guerra contra Gaza” y se comprometió a restablecer las relaciones con Israel si ganaba la presidencia de Venezuela, como se ha encargado de recordarnos Olga Rodríguez. 


Amiga del sionismo, participante de "Viva Europa", los encuentros ultra de Patriots en Madrid, pidió la invasión estadounidense de su propio país, nos refresca Irene Zugasti. Por su parte Aína Díaz escribe que usar el Premio Nobel de la Paz para fijar el relato mundial de que en Venezuela hay una dictadura (paso previo para que la invadan y se queden con su petróleo como en Irak) es de lo más cínico e imperialista que nos va a dar este lustro. Con un genocidio en directo, las guerras “de costumbre”, (literalmente) y tanta gente jugándose la vida por los derechos humanos, hay quien juega no ya a la degradación del Nobel, sino a la degradación de la paz, precisa Vicky Rosell. 


Sobre el encuentro ‘Viva Europa’, organizado por Santiago Abascal en Madrid, Pablo Macca nos ilustra recordándonos que allí estuvieron presentes líderes de la extrema derecha como Viktor Orbán, Javier Milei, Giorgia Meloni o el hijo de Jair Bolsonaro. 


Creo que tienen razón quienes sostienen que ese premio significa luz verde a una guerra de cambio de régimen contra Venezuela (y potencialmente Cuba), similar a premios de la Paz como el de Obama. que precedió a intervenciones en Libia e Irak. Como ha escrito Antonio Izquierdo, Machado era la apuesta de Trump para el Nobel si el comité noruego no se lo otorgaba a él mismo. Machado es el ariete político de EE.UU. contra Venezuela. Trump no gana, pero gana Trump.


La decisión de otorgar el premio Nobel de la Paz a una figura que fomenta la desestabilización en lugar de promover la verdadera paz refleja la politización del Comité Noruego. Premiar a María Corina Machado devalúa el galardón más de lo que ya lo estaba desde que se lo concedieron  a Henry Kissinger. 


El año en que Médicos Sin Fronteras ha perdido a casi todo su equipo en los bombardeos de Gaza; el año en que la Federación de Periodistas Palestinos ha enterrado a 237 de sus profesionales; el año en que Francesca Albanese, enviada de la ONU para Palestina, está siendo perseguida por EEUU. tras denunciar el genocidio en Gaza; cuando el fascismo y los delitos de odio crecen en todo el mundo… le han dado el Premio Nobel de la Paz a una golpista venezolana que respalda a la extrema derecha en Europa, en EE.UU. y en Israel.


No hay más preguntas, señoría.


J.T.

viernes, 10 de octubre de 2025

¿Qué está pasando en Marruecos con los jóvenes?


"¡No queremos Mundial, queremos hospitales!" Con este lema entre otros la Generación Z marroquí, los nacidos entre finales de los 90 y principios de 2010, han tomado las calles estos días de octubre protagonizando una oleada de protestas donde ha habido incluso tres muertos ¿Qué está pasando en el país vecino?


Todo comienza el 27 de septiembre, cuando un colectivo anónimo llamado GenZ 212 -el "212" es el prefijo telefónico de Marruecos- convoca concentraciones pacíficas en Rabat, Casablanca y Tánger que en cinco días se extienden hasta catorce ciudades por todo el país. Los jóvenes están indignados porque semanas antes ocho mujeres habían muerto en el hospital público de Agadir durante partos por cesárea evidenciando que el material anestésico estaba en mal estado.


Durante las protestas los jóvenes, mayoritariamente estudiantes universitarios y parados recientes, marchaban con banderas marroquíes en una mano y carteles en la otra: "Estadios por todas partes, hospitales en ninguna" o "¿Dónde fue el dinero de los jóvenes? A Panamá y a las fiestas". Marruecos cuenta apenas con 15.000 médicos para 38 millones de personas, las colas para un chequeo son eternas, los medicamentos muy caros… 


Quienes conocen bien este asunto cuentan que la ira juvenil de estos días no es un arrebato espontáneo sino el estallido de una olla a presión que lleva años cociéndose a fuego lento. Las principales causas son el desempleo juvenil  (las estadísticas oficiales lo cifran en un 36 por ciento, pero en ciudades como Casablanca sube al 48 para los menores de 25 años); en segundo lugar, la insultante desigualdad y en tercero obras faraónicas que consideran un despilfarro innecesario: miles de millones en estadios para el Mundial de 2030, que Marruecos organizará con España y Portugal.


"¿Para qué un circo si no tenemos pan?", es otro de los lemas de los carteles en unas protestas que están obteniendo enorme repercusión dentro y fuera del país. Entre otras cosas porque, como señalábamos más arriba, el día uno de octubre, hubo tres muertos en  Leqliaa, cuando algunos manifestantes intentaron asaltar una comisaría y la gendarmería abrió fuego. Saldo final: más de 400 detenidos, 263 policías heridos y vehículos incendiados en Salé y Agadir. 


Amnistía Internacional clama por una investigación independiente, y el gobierno, en un comunicado del 30 de septiembre, promete "diálogo en instituciones y espacios públicos" mientras elogia la "reacción equilibrada" de las fuerzas de seguridad. La verdadera fuerza de los organizadores de las protestas está en la viralidad que les proporciona promover por redes las convocatorias. GenZ 212 funciona de manera descentralizada, sin líderes fijos, y vota en encuestas online si hay que continuar o es mejor parar. 


No son hippies nostálgicos ni boomers reciclados; son nativos digitales que saltan de la pantalla a la calle, como han hecho en Kenia contra los impuestos o en Georgia para reclamar derechos. Incluye a chavales de barriadas periféricas y fans de fútbol que chocan con antidisturbios cada fin de semana, uniendo así a las clases medias con los marginados.


Hay similitudes con lo ocurrido hace poco en Nepal o Madagascar, como si fueran piezas de un rompecabezas generacional que une continentes. En Nepal, a principios de septiembre, la Gen Z estalló y durante las protestas quemaron el Parlamento y la Corte Suprema: Resultado: 72 muertos. El primer ministro tuvo que dimitir y una exjueza anticorrupción llamada Sushila Karki asumió el poder de manera interina… tras votaciones on line!


En Madagascar, desde el 18 de septiembre, el detonante fueron los constates cortes de agua y luz. Las manifestaciones de estudiantes convocadas por redes acabaron con 22 muertos, saqueos en la capital del país, la disolución del gobierno y el nombramiento de un general como primer ministro. 


En los tres casos, Marruecos, Nepal y Madagascar, el hilo común es la frustración de una juventud que ve cómo el dinero vuela a infraestructuras no prioritarias (estadios en Marruecos, teleféricos en Madagascar, privilegios nepalíes) mientras se carece de servicios básicos. Las armas son Discord y TikTok. Desde Indonesia hasta Serbia, la Gen Z no parece dispuesta a conformarse con migajas: quieren reescribir el guion.


J.T.

jueves, 9 de octubre de 2025

Canal Horror Televisión



La gestión de los cribados de cáncer de mama en Andalucía es un escándalo y una vergüenza, ¿verdad que nadie lo duda? Pues bien, el tratamiento que Canal Sur Televisión viene haciendo del asunto es más escandaloso y más vergonzoso aún si cabe. Un horror. Un bochorno para los profesionales que trabajan en la casa y un insulto colosal para los espectadores que tienen derecho a ser debidamente informados.


El Consejo Profesional de la televisión pública autonómica ha redactado un informe con el tratamiento otorgado al asunto durante los diez primeros días de andadura. Divulgarlo tal cual, a pesar de que las precisiones técnicas pueden resultar excesivas para el lector medio, me parece en este caso recomendable porque, a medida que transcurra el tiempo, puede que resulte útil. El documento permitirá hacerse una idea de hasta dónde pudo llegar el pitorreo y la falta de respeto en una televisión pública a la hora de administrar la información –la desinformación más bien- de un tema donde dos mil mujeres andaluzas como mínimo tenían en juego sus propias vidas.


Lo que leerán más abajo es un claro ejemplo de lo que un profesional del periodismo que respete su oficio jamás debe de hacer, el comunicado del Consejo Profesional de la RTVA que reproduzco a continuación es la demostración de lo que sucede cuando un medio olvida que se debe a quienes lo pagamos y no a los intereses de los gobernantes.



He aquí el comunicado: ,


“CANAL SUR TRATA DE OCULTAR EL ESCÁNDALO DE LOS

CRIBADOS DE CÁNCER DE MAMA EN ANDALUCÍA”


72 horas y 19 minutos, éste ha sido el tiempo transcurrido entre que se desvelaran, el domingo 28 de septiembre a las 14 horas y 12 minutos, los errores en los protocolos de detección precoz de cáncer de mama en Andalucía y el 1 de octubre, a las 14 horas y 31 minutos, Canal Sur TV ofreciera la primera información sobre el tema. Solo este dato, tres días ocultando la información, demuestra cómo desde la dirección de informativos se han vulnerado los principios de actualidad, relevancia e interés que deben guiar toda buena práctica periodística.


Se ocultaron durante tres días las noticias sobre los cribados de cáncer


Canal Sur TV no ha actuado como un medio de comunicación público, respetando los principios de independencia, pluralismo, veracidad y servicio público a la hora de ofrecer la información sobre los errores que han afectado a 2000 mujeres andaluzas. Ha actuado como una herramienta más en la estrategia del gobierno andaluz a la hora de intentar minimizar esta crisis. Datos:


- Entre el día que surge la a información, el 28 de septiembre, y el 7 de octubre, Canal Sur TV ha dedicado a los errores en los protocolos de cribado 28 minutos y 28 segundos. Además de haber estado tres días ocultando a su audiencia la noticia, la primera información se produce para ofrecer las disculpas por los errores del presidente Juanma Moreno. Unas disculpas por un tema que hasta entonces la televisión pública de Andalucía no había recogido en sus escaletas.


Un minuto y medio para informar sobre las mujeres afectadas; veinte al discurso del gobierno andaluz 


- De los 28 minutos y 28 segundos dedicados al tema, solo se ha empleado 1 minuto y 30 segundos para dar voz a las mujeres afectadas, poco más de 30 segundos a la responsable de la asociación Amama que denuncia el escándalo y 44 segundos a su abogado y 6 minutos y 03 segundos a las críticas de los partidos andaluces en la oposición. El resto del tiempo, casi 20 minutos, han sido dedicados a los testimonios y argumentos del gobierno andaluz. 


- La línea informativa de Canal Sur ha coincidido con el argumentario de San Telmo. Restar importancia a los errores, situándolos en el 2 por ciento de los casos, defendiendo la actuación de la Junta, volviendo a revisar los protocolos y comprometiéndose a llamar a todas las afectadas. La televisión pública de Andalucía ha evitado informar de las críticas desde la Consejería de Salud tildando de alarmistas a las mujeres denunciantes, que no se les avisó para no generar incertidumbre o ansiedad, que los errores ya eran conocidos desde el año 2024, de las privatizaciones en la realización de mamografías o del mayor número de casos de cáncer de mama en Andalucía respecto al resto del país. Los únicos testimonios de las afectadas han sido celebrando que se iban a revisar todas las pruebas, obviando que las siguientes citas se pueden demorar otra vez durante seis meses o más de un año. 


- Canal Sur no ha hablado nunca de negligencia, ni de responsabilidades y solo durante 22 segundos, ocho días después de surgir la noticia, han hecho la primera referencia a las posibles consecuencias judiciales del caso. Siempre eso sí restándole trascendencia. “Amama sigue estudiando los casos de las afectadas. De momento, no habrá querellas por el cribado de mama”, fue el rótulo de la información el 7 de octubre, con ya varias denuncias anunciadas y la fiscalía sobre el caso. 


Diferente criterio y el doble de tiempo a las pulseras para maltratadores en España que a los fallos en los cribados en Andalucía. 


- Solo en la semana anterior, la dirección de informativos de Canal Sur TV dedicó casi el doble de tiempo, 45 minutos y 04 segundos, a los errores en las pulseras para maltratadores. Desde que surgió este escándalo que afecta al gobierno central, los informativos de Canal Sur TV N1 y N2 han ofrecido 23 vídeos, paneles o directos sobre este asunto y hay 55 referencias informativas en el archivo de documentación de la televisión de Andalucía, con presencia casi diaria en sus espacios de noticias durante semanas. En el caso de las pulseras se ha dado voz a todos los actores: policías, jueces, sindicatos, asociaciones de mujeres, víctimas o partidos de la oposición. En el caso de los cribados, predomina el discurso del gobierno andaluz y no se ofrece ni un solo testimonio de médicos, sindicatos, asociaciones de pacientes o expertos en la materia. Se rechazan siempre desde edición los testimonios de la ministra de sanidad.


- Entre el 28 de septiembre y el 7 de octubre, en que Canal Sur TV ha dedicado 28 minutos a los fallos en los protocolos de detección, la dirección de informativos ha dedicado 40 minutos a las investigaciones judiciales al gobierno central. 


- Llama la atención en las escaletas de Canal Sur TV, que todo el relato sobre los errores en los cribados se compensa con el discurso propagandista de la Junta de inauguración de nuevas infraestructuras sanitarias, dedicando un tiempo de 12 minutos y 59 segundos a los actos de Juanma Moreno. La imagen del presidente andaluz se ofrece en positivo, vinculada a nuevas instalaciones, y solo de pasada y unida a las disculpas, nunca a la gestión, en la crisis de los cribados.


Cuando todos los medios del país han entrevistado a las mujeres que denunciaron los errores en la sanidad andaluza, Canal Sur TV no ha realizado entrevista alguna en sus programas informativos. Al revés, presentadores de programas de producción externa han sido noticia por haber minimizado el escándalo con dosis de frivolidad y defender el discurso y las versiones ofrecidas desde el gobierno andaluz. 


No se trata de nada nuevo en los informativos de Canal Sur TV, este es el proceder habitual desde la dirección de informativos. Pero ante un tema tan sensible y que tanta preocupación y alarma ha levantado, la quiebra de la obligación de servicio público para convertir la televisión de Andalucía en un agente más de la estrategia de comunicación de la Junta, se hace especialmente doloroso para las profesionales y los profesionales de la RTVA que siempre queremos informar con criterios periodísticos y al servicio únicamente de los andaluces.”